Cannabis medicinal

Primeros resultados en el acompañamiento desde la salud pública y la atención primaria de la salud

Resumen

Introducción: El cannabis se utiliza por un número cada vez mayor de personas con diferentes patologías por sus efectos paliativos y la mejora en su calidad de vida. Tanto el acceso al cannabis como su acompañamiento continúa siendo complejo y diverso, lo que constituye un problema de salud pública para el cual proponemos contribuir a dar respuesta a través de los resultados obtenidos en nuestra investigación.

Objetivo: Cuál es el estado de situación en relación al uso del cannabis terapéutico en nuestra región. Estudio exploratorio, de corte transversal con muestra de usuarios mayores de 18 años que usan aceite regularmente al menos durante 3 meses. 

Metodología: Enfoque cuali-cuantitativo. Se administró una entrevista semi-dirigida individual con el objetivo de indagar sobre el acceso, los usos, los impactos y el acompañamiento médico en usuarios de cannabis terapéutico de nuestra región. Y un cuestionario auto-administrable construido específicamente para esta investigación que incluyó una encuesta con preguntas que valoran el proceso en su etapa inicial y final; y una serie de afirmaciones planteadas a la manera de escala Likert, tomando como referencia para su construcción la Escala World Health Organization Quality of Life (WHOQOL-BREF) construida por la OMS para evaluar Calidad de vida. Los datos fueron sometidos a análisis cuanti y cualitativo. N: 114. Media: 60 años. 

Resultados: Diagnósticos más frecuentes. Motivos de uso. Cantidad de fármacos utilizados y polimedicación. Tiempo de uso del aceite y accesibilidad. Origen de derivación. Percepción de la mejoría y cambios percibidos. El 37,7% refiere patologías osteo-articulares; 22,8% ECNT; 14,9% diagnósticos oncológicos y 8,8% tiene padecimientos mentales. El 83,3% toma alguna medicación. De ellos 46,5% toma entre 2 y 5 fármacos. El 18,4% usa 1 fármaco; el 16,7% entre 6 y 10 y el 1,8% más de 10 El 37,4% refiere la disminución del dolor, el 26,2% un mejor descanso. El 10,3% mejor control de la ansiedad. De los datos obtenidos se infiere que los resultados percibidos con el uso de aceite medicinal no sólo impactan en la sintomatología motivo de la consulta, sino que resulta beneficioso en otras áreas de la vida.

Conclusiones: El cannabis es excelente reductor de daños. Su alcance, su economía y autonomía respecto a la salud como derecho, hacen de esta terapéutica un instrumento óptimo para la APS, acorde a las patologías prevalentes, el acceso a la medicación, los atravesamientos psicosociales adversos que marcan a las comunidades que acompaña la salud pública, mejorando su calidad de vida y sus padecimientos.